No soy fotógrafo ni lo intento. Tampoco soy escritor, ni lo pretendo. Sólo miro a mi alrededor y capto lo que me invento.
El juego de la silla
Cuando el dictador dejó la silla vacía, fue el general el que la ocupó. Pero ya esperaba turno, impaciente, el clérigo.
Egipto
Cuando las protestas se hicieron insostenibles, las cortaron de raíz simulando la llegada de la democracia.
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